Helado De Lavanda: ¡Una Explosión En Tu Paladar!
¡Hola amante de los dulces artesanales! ¿Has probado alguna vez un helado con un toque floral, fresco y absolutamente encantador? ¡Pues estás en el lugar correcto! Te presentamos una receta que va a revolucionar tus tardes de verano (o de invierno): el helado de lavanda. Y no solo estamos hablando de una explosión de sabor inigualable, sino de un postre que viene cargado de beneficios que quizás no conocías. ¡Sigue leyendo y descubre cómo prepararlo y por qué deberías incorporar este helado en tu repertorio culinario!
Necesitarás tener a mano los siguientes ingredientes
Para comenzar nuestra aventura floral necesitaremos los siguientes ingredientes:
- Dos cucharaditas de flores de lavanda seca
- 300 ml de leche
- 4 yemas de huevo
- 50 g de azúcar
- 300 ml de crema de leche
- 50 g de miel
No te pierdas ni un paso para que tu helado de lavanda salga genial
Venga si ya tienes todo a mano, sigue estos sencillos pasos:
- Infusión de lavanda: En una olla pequeña, lleva a ebullición la leche junto con flores de lavanda. Una vez que hierva, retira del fuego y deja reposar durante 15 minutos para que la lavanda infunda bien.
- Mezcla de yemas y azúcar: En un bol, bate las yemas con el azúcar hasta obtener una mezcla blanquecina y espesa.
- Unión de los elementos: Retira las flores de lavanda de la leche y ponla nuevamente al fuego. Agrega la mezcla de yemas y azúcar y revuelve constantemente hasta que la mezcla espese un poco, pero sin dejar que hierva.
- Integración de la crema y la miel: Apaga el fuego y añade la crema de leche y la miel, mezclando bien hasta obtener una mezcla homogénea.
- Enfriamiento: Deja enfriar la mezcla a temperatura ambiente y luego refrigérala por al menos 4 horas, idealmente toda la noche.
- ¡A la heladera!: Pasado el tiempo de refrigeración, vierte la mezcla en tu heladera y sigue las instrucciones del fabricante para obtener un helado suave y cremoso.
Aprovéchate de todos los beneficios de esta maravillosa planta
¡Este helado de lavanda no solo es una delicia, sino que también trae consigo varios beneficios! Aquí te presentamos algunos:
- Relajante natural: La lavanda es conocida por sus propiedades relajantes, ¡disfrutar de este helado puede ayudarte a reducir el estrés!
- Aporte nutricional: Al prepararlo con yemas de huevo, obtienes un aporte extra de proteínas y vitaminas.
- Potencia el sistema inmunológico: La miel es un gran aliado para fortalecer tu sistema inmunológico.
- Digestivo: La lavanda puede ayudar a mejorar la digestión, ¡convirtiendo este helado en el postre perfecto!
Y así llegamos al final de nuestra travesía floral en la cocina. ¿Te animas a probarlo? ¡Te aseguramos que este helado de lavanda será un gran descubrimiento para tu paladar! Además, recuerda que no solo estás creando un postre delicioso, sino que estás poniendo un granito de arena en tu bienestar gracias a los múltiples beneficios que te puede aportar.
Así que ya sabes, ¡manos a la obra! Y no te olvides de compartir tu experiencia con nosotros, ¡Estamos deseando leer tus comentarios y ver fotos de tu obra maestra helada!
Referencias Bibliográficas
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